En los estudios de tipo epidemiológico sobre el consumo de drogas, los datos actuales indican que, en general, el porcentaje de consumidores de alguna droga ilegal a lo largo de la vida: es superior a un 40 %; está próximo al 75 % es casi de un 100% es inferior a un 25 .
Los programas de prevención de drogodependencias no parecen indicados para: jóvenes con una integración social adecuada personas mayores de edad convictos recluidos en centros penitenciarios personas diagnosticadas como drogadictas.
Una característica psicológica previa existente en muchos individuos que se inician en el consumo de drogas ilegales en la adolescencia es su: apertura emocional inteligencia inmadurez emocional asertividad.
Las teorías basadas en la estructura social sugieren que el consumo de drogas es: algo particular y propio de algunos individuos con una personalidad determinada el resultado de la organización de diferentes grupos sociales o de la sociedad en su conjunto la consecuencia de la falta de habilidad de los sujetos para adaptarse a condiciones sociales deprimidas lo esperable de situaciones de poca educación.
Cuando los sujetos toman sustancias adictivas, la respuesta particular de su organismo a ese consumo dependerá, en términos psicofarmacológicos, en última instancia de una relación adecuada entre la afinidad y actividad intrínseca de la sustancia consumida del estado emocional de la experiencia previa en el uso de la sustancia del número de receptores neurales que tienen.
Es característico del antagonismo fisiológico que la sustancia antagonista tenga: poca o nula afinidad por el receptor efectos contrapuestos a los que produce el agonista poca o nula actividad intrínseca por el receptor poca o nula afinidad y actividad intrínseca por el receptor.
Un porcentaje bastante alto de futuras madres embarazadas consume sustancias psicoactivas que pueden afectar al feto porque en él la barrera hematoencefálica no es efectiva la barrera placentaria está poco desarrollada hay menos proteínas plasmáticas inactivadoras los sistemas de difusión facilitada aún no están suficientemente operativos.
Los estudios que emplean drogas como estímulos discriminativos indican que la retirada de algunas de ellas como el alcohol o la nicotina produce efectos similares a los de estímulos: depresivos anhedónicos ansioliticos ansiogénicos.
Datos experimentales sugieren que si una persona se autoadministra continuadamente una droga siempre en un mismo entorno: los efectos placenteros irán disminuyendo progresivamente las sensaciones positivas se irán incrementando paulatinamentehedónicos no desarrollará tolerancia no desarrollará sensibilización.
Una ventaja de los tratamientos sustitutivos con agonistas, aunque no se abandone la adicción totalmente, es que: permiten introducir a los pacientes en programas de consumo controlado ayudan a mejorar otros aspectos del estilo de vida de los sujetos; disminuyen la comorbilidad psiquiátrica disminuyen los efectos de la intoxicación aguda.
Durante todo el proceso que conlleva el tratamiento de cualquier drogodependencia es habitual encontrarse con una clara falta de motivación para el cambio en el paciente. Dicha falta de motivación: es un rasgo característico de la personalidad de los adictos es una estrategia chantajista de este tipo de enfermos es una característica de estado que puede modificarse con intervenciones conductuales es consecuencia del deterioro neurocognitivo de este tipo de personas.
La parte esencial del sistema mesocorticolimbico está formada por el el tálamo el núcleo pálido ventral la amígdala extendida el estriado ventral.
Los agonistas de los receptores D3 dopaminérgicos parecen facilitar la conducta de autoadministración de cocaína reducir los efectos reforzantes positivos de la cocaína bloquear las propiedades como estímulo discriminativo de la cocaína potenciar los efectos aversivos inducidos por la cocaína.
La hipótesis de que la dopamina puede tener fundamentalmente efectos anticipatorios en la adicción a drogas proviene de estudios de lesiones cerebrales microdiálisis voltametría neuroimagen.
Entre los tratamientos mejor documentados para la dependencia de opiáceos están los de agonistas sustitutivos agonistas de la dopamina bupropión disulfiram.
En mujeres heroinómanas embarazadas, el síndrome de abstinencia de esa droga no tiene consecuencias para el feto puede poner en serio peligra su propia vida, aunque sean adultas sanas es más duro que el del estado de no embarazo puede causar la muerte del feto.
Las propiedades terapeúticas del buproprión para el tratamiento del tabaquismo se basan en su mecanismo de acción como antidepresivo analgésico anticonvulsivante ansiolitico.
La exposición aguda a alcohol (como ocurre en consumidores no habituales) produce sus efectos a través de la activación del sistema glutamérgico colinérgico gabaérgico noradrenérgico.
Los cannabinoides inician sus acciones reforzantes positivas principalmente por la estimulación de los receptores opioides dopaminérgicos CRF CB1.
El sistema neural humano que parece ser dañado en mayor medida por las acciones de las drogas de síntesis es el opioidérgico doparninérgico colinérgico serotonérgico.
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