El modelo de memoria "multialmacén" fue propuesto inicialmente por: William James (1890) Atkinson y Shiffrin (1968) Craik y Lockhart (1972).
La memoria operativa (MO) podría definirse como: Perspectiva funcional de la memoria a largo plazo que le atribuye funciones de procesamiento. Perspectiva funcional de la memoria a corto plazo que le atribuye funciones tanto de almacenamiento como de procesamiento. Perspectiva funcional de la memoria procedimental que le atribuye funciones de codificación e interpretación de la información.
Dentro del modelo multicomponente de MO de Baddeley y Hitch, el componente encargado de la interrelación entre la información almacenada en la MLP y la información que se encuentra en la MCP se denomina: Ejecutivo central. Agenga viso-espacial Retén episódico.
Dentro del modelo de MO propuesto por Baddeley y Hitch, las funciones de inhibición - activación serían llevadas a cabo por el componente: Ejecutivo central. Control articulatorio. Lazo fonológico.
Según el modelo de Procesos Anidados de Nelson Cowan: La MO debe entenderse como el sistema que enlaza o vincula la cognición con la acción. Se plantea una jerarquía de "activaciones" de la información partiendo de aquella que ya tiene disponible el sujeto por su experiencia y aprendizajes. La MO sería la parte de la MLP que es activada en un momento dado.
El modelo de procesos anidados de Nelson Cowan, considera como factor determinante de las diferencias individuales: La capacidad de la MCP. La capacidad de la MLP. El foco atencional.
García-Madruaga, Gómez-Veiga y Vila, proponen: La existencia de tres funciones ejecutivas principales: Inhibición de la respuesta, actualización de las representaciones de la MO y cambio atencional. La existencia de tres funciones ejecutivas principales: la memoria de trabajo, la inhibición o control inhibitorio y la flexibilidad cognitiva. La existencia de cuatro funciones ejecutivas básicas: cambio atencional, focalización y mantenimiento de la información, activación y actualización de la información, e inhibición de respuestas e información.
Según la propuesa de García-Madruaga, Gómez-Veiga y Vila, una de las funciones ejecutivas "off-line" de orden superior sería: Focalización y mantenimiento de la información. Activación y actualización de la información. Revisión de tareas en ejecución y evaluación de los resultados finales.
En cuanto al desarrollo cognitivo: Hay consenso en que el desarrollo de la memoria correlaciona con la capacidad estructural que aumenta progresivamente hasta alcanzar la adolescencia. En general tiende a pensarse, que más allá de ciertos niveles de maduración biológica, el desarrollo cognitivo consiste en un progresivo avance en la capacidad para regular y utilizar estratégicamente los recursos disponibles. La idea que parece imponerse es que la capacidad estructural aumenta fundamentalmente desde la maduración básica del sistema nervioso (5-6 años) hasta la preadolescencia, por lo que las mejoras que se van desarrollando en este periodo parece deberse a ese aumento cuantitativo de dicha capacidad.
Todo parece apuntar a que las funciones ejecutivas de la MO de orden superior (planificación y revisión): Se desarrollan desde edades muy tempranas. Se desarrollan en la preadolescencia. Se desarrollan en etapas posteriores, adquiriendo su máximo nivel en torno a los 25-30 años.
La técnica más utilizada en bebés para el estudio de la memoria es: Imitación diferida. Reconocimiento y asociación de estímulos. Reconocimiento de dibujos.
Rovee-Collier y colaboradores mostraron en sus estudios: Que los bebés de menos de 6 meses apenas disponen de MLP, apoyándose fundamentalmente durante este periodo en su memoria a corto plazo. Que los bebés poseen una notable memoria a largo plazo y que esta no parece mostrarse susceptible a los efectos de la interferencia. Ambas falsas.
El concepto de "espacio mental" es propuesto por el autor: Cowan y colaboradores. Pascual-Leone. Robbie Case.
Uno de los autores que defiende que lo que aumenta con la edad no es tanto la capacidad total de almacenamiento (que se mantendría relativamente constante desde la infancia) si no la eficacia con la que el sujeto es capaz de realizar las operaciones específicas, sería: Cowan y colaboradores. Pascual-Leone. Robbie Case.
Un amplio estudio longitudinal llevado a cabo por Siegel (1994) mostró que la memoria operativa: Muestra un crecimiento gradual desde la infancia hasta los 65 años, momento en el cual comienza a descender. Muestra un crecimiento gradual desde la infancia hasta la adolescencia (16-19 años) y una diminución gradual desde el final de la adolescencia con mayor caída hacia los 65-70 años. Muestra un crecimiento gradual desde la infancia hasta la adolescencia (16-19 años), un mantenimiento hasta los 65-70 años, momento en el cual comenzaría una disminución gradual.
Cuál de las siguientes estrategias de memoria se considera una estrategia de carácter superficial: Organización. Repetición. Elaboración.
Según estudios del equipo de Flavell sobre el uso de la estrategia de repetición: Encontraron que los niños desde edades tempranas (menores de 5 años) hacen uso de esta estrategia básica de memoria. Encontraron que entre los 6-7 años ya se dispone de esta estrategia, pero solo se usa cuando se induce a ello con instrucciones específicas. Encontraron que el uso de esta estrategia de memoria se lleva a cabo de manera espontánea a partir de los 3 años de edad.
Cuál de las siguientes estrategias de memoria seguiría un patrón de desarrollo más tardío: Repetición. Organización. Elaboración.
En los estudios pioneros de Chi (1978, 1987) en torno al juego del ajedrez sobre diferencias entre expertos y novatos, quedó patente: Que la capacidad para memorizar las figuras en el tablero era significativamente más alta en los adultos que en los niños. Que la capacidad para memorizar las figuras en el tablero era prácticamente igual en los adultos que en los niños. Que la capacidad para memorizar las figuras en el tablero era significativamente más baja en los adultos que en los niños.
La buena memoria de los expertos en cualquier campo parece estar basada principalmente: En el uso más efectivo de estrategias. En mayor capacidad estructural de la corteza prefrontal. En la gran estructuración e integración de los contenidos almacenados.
Estudios con niños han puesto de manifiesto que: No hay diferencias en cuanto a estrategias de memoria entre niños escolarizados y niños no escolarizados. Los niños que no reciben educación formal en la escuela manifiestan estrategias de memoria claramente inferiores a los niños escolarizados. Los niños que no reciben educación formal en la escuela manifiestan estrategias de memoria ligeramente superiores a los niños escolarizados.
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