Escucha dicótica: la técnica de amplitud de memoria dividida (Split-span)
Broadbent, en línea con su idea de filtro selectivo, explicó este resultado argumentando que la
selección de la información se producía en fases tempranas del procesamiento, recurriendo a propiedades físicas de la información, tal como la localización espacial del mensaje. Así, mientras el mensaje de uno de los oídos era atendido, el otro mensaje se mantenía en espera
en una especie de almacén, de tal forma el filtro atencional cambiaría al oído alternativo después de que se comunicaran los dígitos del primer oído. se producía en fases tardia del procesamiento, recurriendo a propiedades físicas de la información, tal como la localización espacial del mensaje. Así, mientras el mensaje de uno de los oídos era atendido, el otro mensaje se mantenía en espera
en una especie de almacén, de tal forma el filtro atencional cambiaría al oído alternativo después de que se comunicaran los dígitos del primer oído. se producía en fases tempranas del procesamiento, recurriendo a propiedades físicas de la información, tal como la localización espacial del mensaje. Así, mientras el mensaje de uno de los oídos era atendido, el otro mensaje se mantenía en espera
en una especie de aprendizaje, de tal forma el filtro atencional cambiaría al oído alternativo después de que se comunicaran los dígitos del primer oído.
Escucha dicótica: la técnica de amplitud de memoria dividida (Split-span)
Contrarios a la propuesta de selección temprana de Broadbent, algunos trabajos posteriores demostraron que la selección de los ítems podía realizarse también recurriendo a propiedades semánticas, y no sólo mediante claves físicas como la localización (Bartz, Satz y Fenell, 1967) que la selección de los ítems podía realizarse también recurriendo a propiedades semánticas, y sólo mediante claves físicas como la localización (Bartz, Satz y Fenell, 1967) que la selección de los ítems no podía realizarse también recurriendo a propiedades semánticas, y no sólo mediante claves físicas como la localización (Bartz, Satz y Fenell, 1967).
Escucha dicótica: la técnica de amplitud de memoria dividida (Split-span)
Contrarios a la propuesta de selección temprana de Broadbent, algunos trabajos posteriores
demostraron que la selección de los ítems podía realizarse también recurriendo a propiedades
semánticas, y no sólo mediante claves físicas como la localización (Bartz, Satz y Fenell, 1967): Presentaba en cada oído una lista compuesta por dígitos y monosílabos (oído derecho: who-3-
there, oído izquierdo: 2-goes-9), los sujetos tendían a recordarlos según el canal, primero un
oído y luego el otro, (igual que en el de Broadbent). Sin embargo, si pedía a los sujetos que los
seleccionaran categorialmente, es decir, recodar primero los dígitos y luego las palabras, lo
hacían sin mayores problemas. Presentaba en cada oído una lista compuesta por dígitos y monosílabos (oído derecho: who-3-
there, oído izquierdo: 2-goes-9), los sujetos tendían a recordarlos según el canal, primero un
oído y luego el otro, (igual que en el de Broadbent). Sin embargo, si pedía a los sujetos que los
seleccionaran categorialmente, es decir, recodar primero los dígitos y luego las palabras, lo
hacían con mayores problemas. Presentaba en cada oído una lista compuesta por dígitos y monosílabos (oído derecho: who-3-
there, oído izquierdo: 2-goes-9), los sujetos tendían a recordarlos según el canal, primero un
oído y luego el otro, (igual que en el de Broadbent). Sin embargo, si pedía a los sujetos que los
seleccionaran categorialmente, es decir, recodar primero los palabras y luego los dígitos, lo
hacían sin mayores problemas.
Tareas de detección auditiva.
En estas tareas, los participantes escuchan secuencias o series de estímulos auditivos, debiendo indicar cuándo han escuchado un determinado target, (presionar un pulsador cuando detecten un tono de 1200 Hz, entre secuencias de tonos de otras frecuencias, o sobre un fondo de ruido blanco (formado por todas las frecuencias, pero ninguna sobresale). escuchan secuencias o series de estímulos auditivos, debiendo indicar cuándo han escuchado un determinado target, (presionar un pulsador cuando detecten un tono de 1200 Hz, entre secuencias de tonos de otras frecuencias, o sobre un fondo de ruido negro (formado por todas las frecuencias, pero ninguna sobresale). escuchan secuencias o series de estímulos auditivos, debiendo indicar cuándo han escuchado un determinado target, (presionar un pulsador cuando detecten un tono de 1200 Hz, entre secuencias de tonos de otras frecuencias, o sobre un fondo de ruido gris (formado por todas las frecuencias, pero ninguna sobresale).
. Tareas de detección auditiva.
Las personas tenemos buena capacidad para dividir nuestra atención entre ambos oídos y detectar targets relevantes aislados que pueden aparecer en cualquiera de ellos (Sorkin, Pohlmann y Gilliom, 1973). para dividir nuestra atención entre ambos oídos y detectar targets relevantes pocos aislados que pueden aparecer en cualquiera de ellos (Sorkin, Pohlmann y Gilliom, 1973). para dividir nuestra atención entre ambos oídos y detectar targets relevantes no aislados que pueden aparecer en cualquiera de ellos (Sorkin, Pohlmann y Gilliom, 1973).
Tareas de detección auditiva.
La detección es buena cuando solo se presenta un target, o cuando se diferencien bien entre sí al utilizar varios targets. no es buena cuando solo se presenta un target, o cuando se diferencien bien entre sí al utilizar varios targets. es buena cuando solo se presenta un target, pero no cuando se diferencien bien entre sí al utilizar varios targets.
Tareas de detección auditiva.
El problema surge cuando debemos detectar dos targets que aparecen al mismo tiempo, uno en cada oído (llamado “déficit del doble target”). Esta tarea es muy dificultosa y demuestra que la atención no se puede compartir apropiadamente entre amos oídos. tres targets que aparecen al mismo tiempo, uno en cada oído (llamado “déficit del doble target”). Esta tarea es muy dificultosa y demuestra que la atención no se puede compartir apropiadamente entre amos oídos. tres targets que aparecen al mismo tiempo, uno en cada oído (llamado “déficit del doble target”). Esta tarea es muy dificultosa y demuestra que la atención se puede compartir apropiadamente entre amos oídos.
Tareas de detección auditiva.
Es decir, podemos dirigir la atención a múltiples fuentes estimulares, pero parece emerger un cuello de botella en el procesamiento cuando se requiere detectar varios estímulos relevantes que aparecen a la vez. a múltiples fuentes estimulares, pero parece emerger un cuello de botella en el procesamiento cuando se requiere detectar un estímulos relevantes que aparecen a la vez. a múltiples fuentes estimulares, pero parece emerger un cuello de botella en el procesamiento cuando no se requiere detectar varios estímulos relevantes que aparecen a la vez.
Tareas de detección auditiva.
También se sabe, que el déficit del doble target aparece, incluso, cuando los sujetos saben de antemano en qué oído se presentará un target, lo que a priori facilitaría la detección
simultánea del otro target en el oído alternativo. aparece, incluso, cuando los sujetos saben de antemano en qué oído se presentará un target, lo que a priori nunca facilitaría la detección simultánea del otro target en el oído alternativo. aparece, incluso, cuando los sujetos saben de antemano en qué oído se presentará un target, lo que a priori facilitaría la detección
una detrás del otro target en el oído alternativo.
Tareas de detección auditiva.
En conclusión: dividir la atención auditiva entre diferentes canales para detectar estímulos relevantes simultáneos es mucho más difícil que atender exclusivamente a una única fuente de información (Schneider y Shiffrin, 1977) entre diferentes canales para detectar estímulos relevantes simultáneos es mucho más fácil que atender exclusivamente a una única fuente de información (Schneider y Shiffrin, 1977) entre los mismos canales para detectar estímulos relevantes simultáneos es mucho más difícil que atender exclusivamente a una única fuente de información (Schneider y Shiffrin, 1977).
Funciones de alerta de la atención auditiva
Nuestra capacidad para atender a estímulos sonoros es, en gran medida, independiente de la posición de la cabeza y de los oídos. “Esta neutralidad del sistema auditivo lo convierte en un
excepcional sistema de alerta temprana, listo para recibir y procesar estímulos provenientes desde cualquier dirección, independientemente de la orientación adoptada por el organismo”, Scharf, 1998. en gran medida, independiente de la posición de los nervios y de los oídos. “Esta neutralidad del sistema auditivo lo convierte en un
excepcional sistema de alerta temprana, listo para recibir y procesar estímulos provenientes desde cualquier dirección, independientemente de la orientación adoptada por el organismo”, Scharf, 1998. en gran medida, dependiente de la posición de la cabeza y de los oídos. “Esta neutralidad del sistema auditivo lo convierte en un
excepcional sistema de alerta temprana, listo para recibir y procesar estímulos provenientes desde cualquier dirección, independientemente de la orientación adoptada por el organismo”, Scharf, 1998.
Función de alerta del HOC (Haz olivococlear).
Contrariamente a lo que sucede con los ojos, nuestros oídos no se pueden mover con vistas a facilitar la captura del sonido. Sin embargo, esto no excluye que la atención auditiva pueda estar supeditada a algún tipo de control fisiológico interno. pueden mover con vistas a facilitar la captura del sonido. Sin embargo, esto no excluye que la atención auditiva pueda estar supeditada a algún tipo de control fisiológico interno. no se pueden mover con vistas a facilitar la captura del sonido. Sin embargo, esto excluye que la atención auditiva pueda estar supeditada a algún tipo de control fisiológico interno.
Función de alerta del HOC (Haz olivococlear)
La cóclea (estructura anatómica situada en el oído interno donde se localizan los receptores sensoriales) recibe inputs desde el cerebro y, tal vez, estos inputs puedan ejercer un control sobre dónde dirigir nuestra atención auditiva. Unas 1400 fibras nerviosas (el llamado haz olivococlear –HOC-) conectan el tronco del encéfalo con la cóclea, transmitiendo un input que proviene de los centros auditivos del lóbulo temporal.
Este input eferente podría ayudar a sintonizar los receptores sensoriales, favoreciendo la selección de un sonido relevante en detrimento de otro irrelevante (Rasmussen, Scharf ), lo que constituye un excelente sistema de alerta y control necesario para protegernos de las distracciones recibe inputs desde el cerebro y, tal vez, estos inputs puedan ejercer un control sobre dónde dirigir nuestra atención auditiva. Unas 1400 fibras nerviosas (el llamado haz olivococlear –HOC-) conectan el tronco del encéfalo con la cóclea, transmitiendo un input que proviene de los centros auditivos del lóbulo temporal.
Este input referente podría ayudar a sintonizar los receptores sensoriales, favoreciendo la selección de un sonido relevante en detrimento de otro irrelevante (Rasmussen, Scharf ), lo que constituye un excelente sistema de alerta y control necesario para protegernos de las distraccionesprotegernos de las distracciones recibe inputs desde el cerebro y, tal vez, estos inputs puedan ejercer un control sobre dónde dirigir nuestra atención auditiva. Unas 1400 fibras nerviosas (el llamado haz olivococlear –HOC-) conectan el tronco del encéfalo con la cóclea, transmitiendo un input que proviene de los centros auditivos del lóbulo temporal.
Este input eferente podría ayudar a sintonizar los receptores sensoriales, favoreciendo la selección de un sonido irrelevante en detrimento de otro irrelevante (Rasmussen, Scharf ), lo que constituye un excelente sistema de alerta y control necesario para protegernos de las distracciones.
Función de alerta del HOC (Haz olivococlear)
Por ejemplo, los gatos a los que se les ha lesionado el HOC se distraen más fácilmente ante un ruido irrelevante que los gatos no lesionados. Cuando el input eferente del JHOC está intacto,,
los gatos, y quizá las personas, son menos susceptibles a la distracción e interferencia ocasionada por el ruido. Sin embargo, ese control eferente (sensible a la presencia de estímulos exógenos), tal vez no desempeñe un papel tan destacado cuando la atención
auditiva está bajo control del sujeto (orientada endógenamente). no se distraen más fácilmente ante un ruido irrelevante que los gatos no lesionados. Cuando el input eferente del JHOC está intacto,, los gatos, y quizá las personas, son menos susceptibles a la distracción e interferencia ocasionada por el ruido. Sin embargo, ese control eferente (sensible a la presencia de estímulos exógenos), tal vez no desempeñe un papel tan destacado cuando la atención auditiva está bajo control del sujeto (orientada endógenamente). se distraen más fácilmente ante un ruido relevante que los gatos no lesionados. Cuando el input eferente del JHOC está intacto,,
los gatos, y quizá las personas, son menos susceptibles a la distracción e interferencia ocasionada por el ruido. Sin embargo, ese control eferente (sensible a la presencia de estímulos exógenos), tal vez no desempeñe un papel tan destacado cuando la atención
auditiva está bajo control del sujeto (orientada endógenamente).
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