Subirats (2004) destaca las siguientes siete dimensiones de la exclusión social: Económica, laboral, formativa, sociosanitaria, residencial, relacional y participativa. Ocupacional, sociocultural, educativa, participativa, psicológica, relacional y política. Laboral, formativa, legal, ocupacional, identitaria, sociosanitaria y participativa. Participativa, relacional, residencial, sociosanitaria, formativa, laboral y no financiera.
Desde el enfoque de la Intervención Social, la intervención psicosocial puede darse en tres niveles: Estructural, comunitaria e individual/familiar. Sistémico, familiar y comunitario/social. Individual, grupal/social y sistémico. Individual, familiar y en grupos no familiares.
Para Cortés (2003), los requisitos que hay que tener en cuenta en el análisis de la exclusión residencial son: Idoneidad, confortabilidad, estabilidad y seguridad. Accesibilidad, adecuación, habitabilidad y estabilidad. Habitabilidad, adecuación, idoneidad y confortabilidad. Idoneidad, confortabilidad, inestabilidad y seguridad.
Los tres niveles de intervención del modelo de Pau Pérez y Alberto Fernández Liria (2016) son: Evaluación y diagnóstico, intervención centrada en soluciones y terapia breve. Acompañamiento psicosocial e intervención comunitaria, intervenciones focales y psicoterapia estructurada. Intervención en crisis y primer apoyo psicológico, evaluación y diagnóstico y terapia breve. Terapia breve, evaluación y gestión de programas sociales y formación.
Para Pérez y Fernández (2016), la Psicoterapia estructurada, se encuentra dentro del: Segundo nivel de intervención. Tercer nivel de intervención. Primer nivel de intervención Cuarto nivel de intervención.
El Counselling se puede definir como un: Tipo de intervención directa y dirigida para encontrar la solución del problema del paciente/cliente. Tipo de intervención donde se le aconseja al paciente/cliente lo que debe hacer. Tipo de intervención donde las entrevistas de apoyo y asesoramiento individual buscan facilitar los procesos a través del espacio de diálogo terapéutico. Tipo de intervención basada en la búsqueda de soluciones de manera breve y estratégica.
Dentro de los objetivos generales de la intervención del psicólogo, facilitar la superación de las resistencias individuales y colectivas que impiden un mejor posicionamiento ante el conflicto o situación, es objeto del enfoque: Terapéutico de la Intervención Social. Preventivo de la Intervención Social. De capacitación de la Intervención Social. De optimización de la Intervención Social.
En el modelo de intervención sobre trauma psicosocial, la Intervención en Crisis para Pérez y Fernández (2016), se incluye dentro del: Nivel 2 de intervención. Nivel 4 de intervención. Nivel 1 de intervención. Nivel 3 de intervención.
En el nivel 2 del modelo de intervención sobre trauma psicosocial, las intervenciones focales, pueden realizarlas: Profesionales de ayuda, aunque no sean especialistas en salud mental, y agentes claves comunitarios (personas de la propia comunidad que son socialmente reconocidas). Solo profesionales licenciados o graduados en Psicología y con formación en salud mental. Solo profesionales licenciados o graduados en Psicología. Cualquier persona de la comunidad, ya que no requieren ningún tipo de habilidad específica.
Dentro del proceso psicoterapéutico, la construcción de la pauta problema, para Pérez y Fernández (2016), es un objetivo dentro de la fase: Inicial de la Psicoterapia. Intermedia de la Psicoterapia. Indicación de la Psicoterapia. Terminación de la Psicoterapia.
Según Castel (1997), los tres especios sociales diferenciados que surgen de la combinación de los ejes integración-exclusión, son: Zona de seguridad, de integración y marginación. Zona de integración, vulnerabilidad y exclusión. Zona de confort, desarrollo próximo y de vulnerabilidad. Zona de integración, trabajo y relaciones sociales.
Según Whitehead (1990, documento técnico publicado por la OMS), constituyen hechos conocidos de vulnerabilidad: La pobreza, la privación relativa y la exclusión social. El acceso desigual a las necesidades básicas. La pobreza relativa y el empleo. Factores conductuales y biológicos.
En el marco de la rehabilitación psicosocial, la entrevista es el instrumento utilizado con mayor frecuencia y se caracteriza por: Adoptar una forma estructurada siguiendo un guion previo. Adoptar una forma directiva. Adoptar una forma semiestructurada con preguntas abiertas y cerradas. Adoptar una forma libre.
Entre las estrategias principales para reducir las Desigualdades Sociales en salud, tenemos: Estrategia selectiva, reducir la brecha de salud y reducir las desigualdades sociales en toda la población. Estrategia selectiva, políticas públicas saludables y acción comunitaria. Habilidades personales, estrategia selectiva y reducir las desigualdades sociales en toda la población. Reducir la brecha de salud, reducir las desigualdades sociales en toda la población y acción comunitaria.
De acuerdo con el documento sobre Psicología de la Intervención Social del Consejo General de Colegios oficiales de Psicólogos, no sería una función del psicólogo de Intervención Social: La Atención directa. La Mediación. El Asesoramiento y Consultoría Externa. La Dinamización Comunitaria.
La práctica de equipo que hace referencia a que la familia y los profesionales trabajan juntos como equipo colaborativo que comparte información, conocimiento y habilidades, con un responsable que coordina y realiza la mayor parte de la intervención psicosocial, es el de: Equipo interdisciplinar. Equipo transdisciplinar. Equipo multidisciplinar. Equipo unidisciplinar.
La definición de Vulnerable como "aquel cuya autonomía, dignidad o integridad pueden ser amenazadas" se debe a: Whitehead, 1990. Feito, 2007. Cortés, 1997. Ballester, 1999.
En la Atención directa de la intervención social, podemos encontrar: Atención directa: individual o específica. Atención directa: terapéutica o grupal. Atención directa: individual o grupal. Atención directa: psicoterapéutica o grupal.
Entre otras formas de mediación intercultural tenemos: Desde el despacho. Desde el terreno. Personalizada y grupal. Todas son correctas.
El objetivo de la mediación en el ámbito familiar, en los procesos de separación y divorcio (fundamentalmente cuando hay hijos/as) es: Magnificar las virtudes de quien defiende y los defectos del contrario. Ayudar a la pareja a definir cómo va a seguir siendo la familia tras la ruptura conyugal. El acuerdo fácil y superficial y el lograr cambios, transformando el conflicto en colaboración. Favorecer la comunicación descalificativa entre los miembros de la familia para resolver desavenencias.
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