INMIGRACIÓN Y DELINCUENCIA
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Título del Test:![]() INMIGRACIÓN Y DELINCUENCIA Descripción: texto 6 |




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Se puede dudar acerca de cuál es la “verdad” y debatir sobre ella, pero lo que no tiene discusión es que 2 afirmaciones no pueden ser contradictorias entre sí y ser ambas ciertas. V. F. El trabajo se dirige a confrontar 2 verdades que no son reconciliables entre sí: la exclusión social empuja al delito y los inmigrantes (excluidos en mayor medida que los “nativos”) delinquen menos que los nacionales. V. F. Quien crea que los extranjeros delinquen más lo hará aunque haya alguien que le diga que no es verdad porque la mayor parte de los presos son españoles. V. F. Lo que caracteriza a una sociedad democrática es que se puede discutir de todo, que se deba discutir de todo o que todo discurso merezca una calificación moral neutra. V. F. 2018 inmigrantes en España: 9,9%, inmigrantes reclusos: 5% del total. V. F. Si decidimos buscar más delitos (invertir más recursos policiales) con un colectivo, lo extraordinario sería que eso se viese reflejado en el número de delitos detectados. V. F. Harcourt: “efecto trinchete” (ratchet effect). Si para adoptar decisiones de prevención de delitos tenemos como referencia la población penitenciaria y está sesgada, el sesgo se reproduce y multiplica. V. F. Harcourt: “efecto trinquete” (ratchet effect): Si la población inmigrante está sobrerrepresentada y se toma como base para destinar recursos policiales a una mayor investigación de este colectivo, se incrementa la sobrerrepresentación que volverá a considerarse para decidir de nuevo cómo distribuir recursos. V. F. Greco, el derecho penal es, “la última instancia para la resolución de cuestiones empíricas”. V. F. Una cosa es que exista un sesgo y otra que la existencia de un sesgo cualquiera haga inútil un dato. V. F. Las personas inmigrantes delinquen menos y esto no admite discusión; y encaja en lo que la doctrina progresista sostiene. V. F. Existen 3 premisas que son: los seres humanos son esencialmente iguales, la exclusión social y económica es una de las principales causas de la delincuencia y las personas inmigrantes son excluidas socialmente y económicamente en menor proporción de lo que son los nacionales de un país. V. F. Estos 3 postulados son ciertos y ha de serlo necesariamente el de que las personas nativas delinquen más (P4). V. F. Que exista en casi todos los países una mayor tasa de delincuencia extranjera evidencia que el “problema” no está en el extranjero, sino en su contexto. V. F. Todos los colectivos e individuos reaccionamos de forma parecida a nuestro entorno. V. F. No hay seres humanos que disfruten del hurto o del pequeño menudeo de drogas. No es casual que, a estas actividades se dediquen mayoritariamente personas de los más bajos estratos sociales. V. F. Si partimos de que un 18,5% y un 40,1% de nuestros presos están condenados por delitos vinculados al tráfico de drogas o a ataques al patrimonio y el orden socioeconómico, y reconocemos que, en determinadas circunstancias nos podríamos ver cometiendo esos delitos, entendemos que la mayor parte de la población reclusa podría no haber delinquido solo con un cambio de condiciones sociales. V. F. Los nativos en situación regular disponen de una red de apoyo social más limitada que los inmigrantes. V. F. Si las 3 premisas son ciertas, no puede serlo también la tesis que sostiene que las personas inmigrantes delinquen en menor medida. V. F. Pobreza y discriminación son factores determinantes de la criminalidad. Los extranjeros suelen ser más pobres y más discriminados. V. F. Una política migratoria limitada a “cerrar la puerta” redujera (poco) el número total de migrantes, pero incrementase sus condiciones de clandestinidad y marginación (y, en consecuencia, su propensión al delito). V. F. La estrategia adoptada por la mayoría de corrientes políticas y académicas progresistas para evitar la repercusión social de un mensaje distorsionado ha sido emitir otro mensaje igualmente distorsionado. V. F. Es preciso reducir el ruido e incrementar los argumentos tomando en cuenta lo siguiente: 1. Reconocer un dato indiscutible. 2. Explicarlo y contextualizarlo. 3. Tomar medidas que eviten el sufrimiento de los más fuertes. V. F. Díez Ripollés: Nos resistimos a entrar en las cuestiones político criminales candentes, para evitar ser abrasados, y preferimos refugiarnos en el templado mundo de los conceptos jurídicos. Con ello, desempeñamos las tareas sociales que nos competen, incumplimiento que disimulamos torpemente mediante el empleo descalificante de un conjunto de lugares comunes. V. F. |