Procedimientos Generales de Intervención en Fisioterapia II
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Título del Test:
![]() Procedimientos Generales de Intervención en Fisioterapia II Descripción: Examen Téorico |



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La coordinación se define como la capacidad de realizar movimientos: Fuertes. Rápidos. Armónicos y precisos. Voluntarios. Para que exista coordinación eficaz es necesaria: Fuerza máxima. Estabilidad proximal. Alta velocidad. Co-contracción constante. El equilibrio forma parte del concepto de: Fuerza. Resistencia. Coordinación. Flexibilidad. La coordinación depende de la correcta secuenciación de músculos: Agonistas. Antagonistas. Sinergistas y antagonistas. Posturales. Un déficit de coordinación afecta principalmente a: La estructura ósea. El patrón de movimiento. El metabolismo. La irrigación. El mantenimiento postural requiere: Inmovilidad. Coordinación multisistémica. Contracción máxima. Bloqueo articular. El control de la marcha depende de: Un único centro cortical. Sistemas sensoriales integrados. Solo del cerebelo. Reflejos primitivos. La estabilidad proximal es especialmente importante para: Movimientos distales precisos. Aumentar fuerza. Reducir velocidad. Evitar reflejos. El equilibrio dinámico requiere: Información visual únicamente. Coordinación sensorial y motora. Ausencia de feedback. Rigidez muscular. La coordinación NO implica necesariamente: Ritmo. Precisión. Máxima fuerza. Sincronización. La falta de coordinación se denomina clínicamente: Hipotonía. Ataxia. Espasticidad. Hipertrofia. El control postural anticipatorio depende de: Feedforward. Feedback exclusivamente. Reflejos nociceptivos. Fatiga muscular. La coordinación eficiente reduce: El consumo energético. La fuerza. La movilidad. La propiocepción. El sistema vestibular es clave para: Fuerza. Equilibrio. Dolor. Sensibilidad térmica. El control motor es: Puramente periférico. Exclusivamente cortical. Resultado de integración central y periférica. Independiente de la sensibilidad. El control postural NO depende directamente de: Visión. Propiocepción. Sistema vestibular. Sistema endocrino. La coordinación se puede entrenar principalmente mediante: Inmovilización. Repetición funcional. Descarga total. Estiramientos pasivos. La coordinación incluye movimientos: Analíticos aislados. Globales y funcionales. Forzados. Dolorosos. El equilibrio estático requiere: Movimiento constante. Integración sensorial. Máxima fuerza. Alta velocidad. La alteración de la coordinación se manifiesta principalmente en: El dolor. El gesto motor. La temperatura. El edema. La propiocepción informa sobre: Dolor. Posición y movimiento. Temperatura. Visión. Los propioceptores se localizan principalmente en: Piel. Vísceras. Músculos, tendones y articulaciones. Retina. El principal receptor muscular es: OTG. Huso neuromuscular. Pacini. Ruffini. El huso neuromuscular detecta: Tensión. Longitud y velocidad. Presión. Dolor. Las fibras Ia informan sobre: Longitud estática. Longitud y velocidad. Tensión. Presión. Las fibras II informan sobre: Movimiento rápido. Tensión activa. Longitud estática. Dolor. El OTG se activa principalmente con: Estiramiento pasivo suave. Contracción activa intensa. Presión cutánea. Vibración. El OTG tiene función: Facilitadora. Protectora. Sensitiva cutánea. Visual. El OTG utiliza fibras aferentes: Ia. Ib. II. III. Los receptores articulares son más activos en: Rangos medios. Reposo. Rangos extremos. Inmovilización. Los receptores articulares NO aportan información relevante sobre: Posición extrema. Quinestesia. Estabilidad. Movimiento final. Los mecanorreceptores cutáneos incluyen: Meissner. Krause. Merkel. Todas las anteriores. Los receptores del tacto son generalmente: No acomodables. Poco acomodables. Muy acomodables. Dolorosos. Un receptor ON–OFF es: No acomodable. Acomodable. Muy acomodable. Nociceptivo. La transductibilidad es la capacidad de: Adaptarse. Transformar estímulo en señal eléctrica. Inhibir estímulos. Aumentar fuerza. La acomodación se define como: Generación de PA. Adaptación al estímulo. Contracción refleja. Descarga constante. Un receptor no acomodable mantiene: Descarga variable. Descarga constante. Descarga ON–OFF. Descarga nula. Los husos neuromusculares son: Muy acomodables. Poco acomodables. Exclusivamente cutáneos. Viscerales. La estatestesia se refiere a: Movimiento. Posición estática. Fuerza. Dolor. La quinestesia se refiere a: Posición. Movimiento. Temperatura. Presión. Los receptores cutáneos codifican: Fuerza muscular. Ángulo articular. Velocidad. Longitud muscular. La propiocepción es clave para: Coordinación. Equilibrio. Control postural. Todas. La pérdida propioceptiva afecta principalmente a: El tono. El patrón motor. El metabolismo. La visión. Los receptores viscerales pertenecen a: Propioceptores. Interorreceptores. Exteroceptores. Telerreceptores. Los telerreceptores reciben información: Del interior. A distancia. De músculos. De tendones. El reflejo miotático se activa por: Estiramiento brusco. Estiramiento mantenido. Contracción excéntrica. Dolor. El reflejo miotático produce: Relajación. Contracción. Inhibición. Bloqueo. El reflejo miotático inverso produce: Contracción. Facilitación. Relajación. Co-contracción. El reflejo miotático inverso protege frente a: Hipotonía. Sobrecarga. Fatiga. Inmovilización. La inhibición recíproca permite: Contracción simultánea. Movimiento coordinado. Bloqueo articular. Espasticidad. El arco reflejo mínimo incluye: 1 neurona. 2 neuronas. 3 neuronas. 4 neuronas. Los reflejos están: Aislados del SNC. Modulados por el SNC. Inhibidos siempre. Solo en médula. La neuromodulación del dolor implica: Daño tisular. Procesamiento central. Inflamación. Edema. El concepto “top-down” se refiere a: Control periférico. Influencia cognitiva. Reflejos. Respuesta automática. La confianza del paciente influye en: Neuromodulación. Rigidez ligamentosa. Densidad ósea. Fuerza máxima. La neuromodulación puede explicar: Curación tisular. Disminución del dolor. Regeneración ósea. Hipertrofia. El vendaje puede modular el dolor mediante: Compresión ósea. Estímulos sensoriales. Inmovilización total. Isquemia. El dolor no siempre se correlaciona con: Percepción. Procesamiento central. Daño estructural. Experiencia previa. El modelo biopsicosocial considera: Solo tejido. Solo mente. Factores múltiples. Solo biomecánica. La neuromodulación actúa sobre: SNC. SNP. Ambos. Ninguno. La repetición funcional favorece: Fatiga. Automatización. Dolor. Inhibición. El feedback sensorial es clave para: Fuerza. Aprendizaje motor. Edema. Elasticidad. El miedo al movimiento puede: Mejorar función. Aumentar dolor. Disminuir percepción. Curar lesión. La neuromodulación NO implica: Cambios centrales. Procesamiento cognitivo. Inmovilización absoluta. Influencia emocional. El dolor puede disminuir sin: Cambio estructural. Intervención sensorial. Educación. Movimiento. La educación del paciente influye en: Dolor. Confianza. Función. Todas. La percepción del dolor depende de: Tejido exclusivamente. SNC. Factores psicosociales. Todas. El vendaje puede generar: Efecto placebo. Neuromodulación. Ambos. Ninguno. El procesamiento del dolor puede ser: Ascendente. Descendente. Mixto. Todas. La neuromodulación NO busca: Control del dolor. Cambio perceptivo. Inmovilización. Mejora funcional. La RSPM tiene como finalidad principal: Fortalecer el músculo. Restaurar el bucle sensitivo-motor. Inmovilizar el segmento. Eliminar reflejos. La RSPM se caracteriza por ser un método: Analítico. Farmacológico. Antianalítico. Invasivo. En la RSPM, el estímulo sensorial se utiliza para: Provocar dolor. Generar automatismos. Aumentar fuerza máxima. Reducir movilidad. La RSPM integra el movimiento en actividades: Pasivas. Analíticas. Automáticas. Inmovilizadas. La repetición en RSPM busca principalmente: Fatiga muscular. Automatización del gesto. Hipertrofia. Dolor controlado. En una lesión de tobillo, la RSPM comienza priorizando: Saltos. Trabajo deportivo. Movilidad articular. Alta carga. El uso de estímulos inesperados en RSPM tiene como objetivo: Aumentar fuerza. Mejorar reflejos y ajustes posturales. Disminuir coordinación. Evitar feedback. El trabajo indirecto en RSPM se caracteriza por: Atención focalizada en la lesión. Uso exclusivo del segmento lesionado. Distracción de la atención consciente. Inmovilización. El concepto de “bucle funcional” hace referencia a: Movimiento aislado. Relación lineal. Integración sensorial y motora. Contracción muscular pura. Una alteración del bucle funcional provoca: Mejora del gesto. Movimiento compensatorio. Aumento de estabilidad. Automatización. La RSPM utiliza preferentemente ejercicios: Aislados. Globales. Pasivos. Forzados. El trabajo en cadena cinética cerrada favorece: Aislamiento muscular. Respuestas propioceptivas. Descarga total. Inmovilidad. La progresión en RSPM debe ser: Rápida y brusca. Aleatoria. Progresiva. Dolorosa. El uso de planos inestables se introduce para: Reducir información sensorial. Aumentar propiocepción. Eliminar reflejos. Disminuir equilibrio. La exposición progresiva al gesto lesional busca: Provocar miedo. Aumentar dolor. Prevenir recidivas. Limitar movimiento. La RSPM considera el dolor como: Únicamente periférico. Siempre estructural. Una información modulable. Un signo absoluto. El objetivo final de la RSPM es: Movimiento voluntario consciente. Automatismo funcional. Inmovilización estable. Aumento de fuerza. En la RSPM, la atención excesiva al segmento lesionado: Facilita el automatismo. Mejora el control motor. Puede interferir en la recuperación. Es imprescindible. La RSPM integra principalmente: Fuerza y resistencia. Sensibilidad y movimiento. Dolor y edema. Flexibilidad y fuerza. La reprogramación sensitivo-motora es especialmente útil en: Fracturas inmovilizadas. Lesiones ligamentarias. Quemaduras. Infecciones. La información sensorial alterada tras una lesión afecta a: El hueso. El patrón motor. La piel exclusivamente. El metabolismo. El feedback sensorial correcto favorece: Automatización. Fatiga. Dolor. Inhibición. La RSPM NO busca: Movimiento funcional. Integración automática. Aislamiento muscular. Control postural. La RSPM puede influir en el dolor mediante: Daño tisular. Neuromodulación. Inflamación. Isquemia. La confianza del paciente es clave para: Fuerza máxima. Neuromodulación del dolor. Regeneración ligamentosa. Hipertrofia. El sistema visual contribuye al equilibrio informando sobre: Presión plantar. Movimiento del entorno. Longitud muscular. Tensión. El reflejo vestíbulo-ocular permite: Aumentar fuerza cervical. Estabilizar la mirada. Mejorar audición. Activar reflejos cutáneos. Los bastones permiten principalmente: Visión diurna. Visión nocturna. Visión de colores. Alta resolución. Los conos se concentran principalmente en: Retina periférica. Nervio óptico. Fóvea. Quiasma. El vendaje funcional tiene como objetivo principal: Inmovilizar totalmente. Permitir movimiento indoloro. Sustituir la rehabilitación. Aumentar fuerza. El vendaje funcional actúa principalmente mediante: Efecto estructural. Estímulo sensorial. Isquemia. Bloqueo articular. El vendaje NO debe utilizarse en: Prevención. Esguince leve. Rotura ligamentosa completa. Retorno al deporte. El kinesiotape es un vendaje: Rígido. Inelástico. Elástico. Compresivo rígido. La evidencia científica del kinesiotape es: Muy sólida. Inexistente. Inconsistente. Superior al vendaje rígido. El vendaje puede mejorar la propiocepción mediante: Inmovilización. Estímulos cutáneos. Aumento de fuerza. Bloqueo sensorial. El efecto placebo del vendaje se relaciona con: Daño tisular. Neuromodulación. Isquemia. Hipoxia. La hidroterapia se basa en: Propiedades químicas. Propiedades físicas del agua. Estimulación eléctrica. Vibración. El principio de Arquímedes explica: Presión. Viscosidad. Flotación. Temperatura. La flotación permite: Aumentar carga. Disminuir peso aparente. Aumentar impacto. Reducir retorno venoso. La presión hidrostática aumenta con: Temperatura. Profundidad. Velocidad. Flotación. Un efecto cardiovascular de la inmersión es: Disminución del retorno venoso. Aumento del retorno venoso. Hipotensión extrema. Bradicardia patológica. La resistencia hidrodinámica depende de: Temperatura. Velocidad del movimiento. Profundidad. Flotación. El medio acuático se caracteriza por: Mayor impacto. Menor gravedad efectiva. Mayor riesgo. Mayor velocidad. El agua caliente está indicada para: Edema agudo. Inflamación reciente. Control del dolor. Hemorragia. El agua caliente está contraindicada en: Dolor crónico. Edema. Rigidez. Contractura. Los baños de contraste estimulan: Vasoconstricción constante. Mecanismos vasomotores. Inmovilidad. Isquemia. En neurología, la hidroterapia facilita: Aislamiento muscular. Movimiento funcional. Inmovilización. Dolor. El entorno acuático favorece el bienestar por: Fatiga. Temperatura y contexto. Hipoxia. Dolor. La ausencia de sudoración se debe a: Falta de esfuerzo. Medio líquido. Vasoconstricción. Inactividad. La hidroterapia permite trabajar: Solo fuerza. Solo movilidad. Fuerza, equilibrio y coordinación. Solo resistencia. |





