PSICOLOGIA DEL DESARROLLO II
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Título del Test:![]() PSICOLOGIA DEL DESARROLLO II Descripción: Prueba psicología desarrollo |




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A partir de los años 70, con el auge de la fonología generativa, la unidad de análisis comenzó a ser los rasgos que constituyen los fonemas (anteriormente la unidad de análisis era los sonidos independientes). V. F. Un concepto clave de esta aproximación es el de restricciones, el cual sustituirá a las reglas. V. F. Esta aproximación distingue entre un nivel de representación subyacente o de estructura profunda (nivel fonológico) y un nivel de representación superficial o de estructura superficial (nivel fonético). V. F. Esta aproximación propone que el desarrollo fonológico no seguiría un patrón universal. V. F. Numerosas investigaciones han demostrado que el corte entre los momentos prelingüístico y lingüístico es radical, de modo que no existe un solapamiento entre ellos (los niños que han comenzado a decir sus primeras palabras dejan de balbucear). V. F. A diferencia de lo que se había propuesto en épocas anteriores, la existencia de “periodos de silencio” entre el balbuceo y la emisión de las primeras palabras parecen ser extremadamente raros. V. F. La mayoría de los autores están de acuerdo en mantener que los sonidos y sílabas características del periodo de balbuceo canónico no guardan relación con las que se emplean en el habla posterior. V. F. Algunos estudios realizados con niños traqueostomizados han mostrado que el practicar con los sonidos, así como escuchar las propias vocalizaciones, juegan un papel esencial en el desarrollo normal del habla. V. F. Esta teoría asume que la representaciones fonológicas de los niños y los adultos son diferentes, por lo que existirá una discontinuidad del desarrollo fonológico. V. F. Según esta teoría, todos los niños nacen con un cierto proceso fonológico siendo su tarea la de aprender a eliminar (suprimir) aquellos procesos que sean inapropiados para su lengua nativa. V. F. Existe un amplio acuerdo entre numerosos autores sobre el tipo de proceso fonológico que emplean los niños. V. F. En las emisiones de una palabra también es típico que los niños produzcan expresiones holísticas o amalgamas. V. F. Aunque los niños emiten palabras únicas preferentemente, todos los autores están de acuerdo en considerar que los niños ya cuentan con un conocimiento gramatical como el de los adultos. V. F. Un problema de los investigadores es demostrar porque los niños no son capaces de demostrar ese conocimiento. Una explicación ampliamente aceptada es que ello se debe a la falta de vocabulario en los niños. V. F. Otra explicación en la que hay acuerdo es que los niños no poseen las habilidades articulatorias necesarias para producir oraciones completas. V. F. La siguiente etapa por la que atraviesan los niños es la que se conoce como telegráfica. Lo más característico de esta etapa es que el niño deja de emitir por completo producciones de una palabra, para comenzar a combinar dos. V. F. Otra característica de esta etapa es que los niños no producen ninguna palabra funcional (preposiciones, conjunciones, artículos, etc.) FALSO. V. F. Dado el carácter telegráfico de las emisiones de dos palabras, un problema al que nos enfrentamos los investigadores es el de analizar la estructura sintáctica de dichas emisiones. De este modo, según la interpretación que demos, estaremos otorgando al niño un mayor o menor conocimiento gramatical. V. F. Escoger un criterio adecuado es muy importante dado que el conocimiento que concedamos o no al niño sobre una determinada marca morfológica va a depender del criterio que adoptemos. V. F. Uno de los criterios es el conocido como “criterio adulto”. Según este criterio, para considerar una determinada marca morfológica productiva dicha marca debe aparecer al menos con dos raíces diferentes. V. F. Otro criterio es el que se conoce como “criterio de porcentaje de usos correctos”. Según este criterio, para considerar una marca morfológica productiva, el niño tiene que producir correctamente en un 90% o más de los contextos obligatorios en que la aplica, en tres muestras consecutivas y al menos en 5 contextos obligatorios. V. F. Uno de los problemas del criterio anterior es que algunas marcas morfológicas no son muy frecuentes, por lo que no son producidas por los niños y numerosos contextos de uso, pese a que podrían dominarlas. Ello nos llevaría a sobrevalorar el conocimiento de los niños. V. F. El mismo Brown planteó que es un factor esencial en la frecuencia de uso, tal que los morfemas que más escuchan los niños son aprendidos antes. V. F. Sin embargo, la complejidad lingüística del morfema no lograba predecir el orden de adquisición de tal modo que independientemente de cómo se firma codifique solo número, mientras que otro codifica el número así como temporalidad, ambos serán adquiridos al mismo tiempo. V. F. En la actualidad, no obstante, contamos con un buen número de estudios realizados en diversas lenguas que no siempre apoyan la propuesta de Brown. V. F. La cuestión de qué es el significado, suele ser considerada en dos partes, las cuales distinguen entre 2 niveles del significado léxico ¿Cuál es la información que el lenguaje comunica?, relacionada con el asunto de la extensión o referencia, y ¿acerca de qué es esa información?, relacionada con el de la intención o sentido. V. F. Uno de los principales problemas en el estudio del significado hace referencia a su naturaleza. En general, la mayoría de los autores están de acuerdo en considerar que el significado es equivalente al concepto. V. F. Pese a ello, de acuerdo con Carey (1982), parece razonable admitir que los significados léxicos serían un subconjunto de todos los conceptos representables mentalmente, es decir, aquellos expresados por palabras únicas. V. F. Otro de los problemas más importantes que tiene planteado la historia del significado hace referencia a la estructura del significado de las palabras: ¿puede descomponerse en rasgos o componentes más pequeños? En este sentido, la mayoría de los autores consideran que todas las palabras se pueden descomponer en rasgos. V. F. Numerosos estudios han demostrado que la producción lingüística es anterior a la comprensión. V. F. Aunque las primeras palabras son adquiridas de forma lenta, en torno a los 18 meses la tasa de aprendizaje se acelera fuertemente, lo que es conocido como explosión del vocabulario. V. F. Aunque también se ha demostrado que no todos los niños muestran esa explosión del vocabulario. V. F. Los niños aprenden al principio palabras de varios tipos: palabras para expresar estados afectivos, palabras ligadas al contexto, palabra referenciales y sociopragmática. Según la mayoría de los autores las primeras en aprenderse serían las referenciales. V. F. Otro fenómeno que suele darse en la infraextensión: uso de una palabra referencial para referirse no solo a todos los objetos, acciones, estados o propiedades que sean nombrados por esa palabra en el lenguaje adulto, sino también para referirse a algunos objetos, acciones, etc. inapropiados. V. F. Según esta hipótesis, los niños se basan en la semántica para descubrir las estructuras sintácticas del lenguaje. V. F. Esta hipótesis se ha aplicado especialmente para estudiar la adquisición del significado de los verbos. V. F. Se suele asumir que los verbos son más fáciles de escribir que los nombres pese a que nombran acciones que son relacionales por definición, efímeras en su naturaleza y realizadas por diferentes actores. V. F. Varios estudios demuestran que el contexto gramatical tiene un fuerte efecto en la interpretación de los verbos. V. F. La facilitación sintáctica es empleada desde muy temprana del desarrollo (por niños muy pequeños). V. F. Una clave de las críticas más importante de esta hipótesis es que la sintaxis quizá pueda suministrar una clave sobre la categoría gramatical a que pertenece una palabra (un objeto, como claridad, una actividad, etc.), Pero la evidencia sintáctica no permitirá al niño generar una representación semántica completa para una palabra. V. F. Para explicar cómo superan los niños el problema de la indeterminación del significado, se han propuesto varias restricciones. La del objeto total establece que los nombres se refieren a objetos de la misma clase más que objetos que están temáticamente relacionados. V. F. La restricción taxonómica, por su parte, establece que las nuevas palabras nombra objetos como un todo más que sus partes o propiedades. V. F. La restricción de la exclusividad mutua predice que los niños prefieren solo un nombre por objeto. V. F. Está restricción supone una ventaja muy importante dado que mediante el empleo de la misma los niños pueden inferir el referente para una nueva palabra sin que el hablante tenga que apuntar explícitamente a los objetos relevantes. V. F. Estas restricciones son solo empleadas por los niños. V. F. La comunicación humana queda perfectamente definida como la transmisión de información entre un emisor y un receptor. V. F. Austin distinguió entre dos tipos de enunciados: constatativo y performativos. Los primeros admiten asignación de felicidad (no puede ser cierto ni falso, sino sólo afortunados o desafortunados según salga bien o mal), mientras que los segundos admiten asignación de verdad o falsedad. V. F. Según Searle, el acto ilocutivo es el que las palabras dicen, el significado literal de la producción sin considerar el contexto. El acto proposicional, por su parte, es el significado real, intencional, del acto del habla. V. F. Los actos de locución dependen más de las intenciones del hablante y de las condiciones y contextos del que habla que de la forma sintáctica de la frase. Por ello, no basta con analizar la sintaxis de la frase, es decir, hay que ir más allá de las descripciones estructurales de las mismas. V. F. Los trabajos de Austin y Searle influyeron directamente en el estudio del desarrollo de la comunicación intencional en los niños, de tal modo que se comenzó a investigar el papel central que juegan las intenciones en la comunicación y la importancia del contexto social en que se desarrollan dicha comunicación incluso en el periodo prelingüístico. V. F. ese a ello, podemos decir que gran parte de estos estudios tenían como finalidad (más o menos encubierta) explicar el desarrollo gramatical desde planteamiento socio interactivos, dedicándose muchos esfuerzos para encontrar un lado causal entre ambos aspectos. En otras palabras, el objetivo no era tanto analizar el fenómeno de la aparición de la comunicación intencional cómo estudiar las consecuencias que este hecho podría tener para posibilitar el desarrollo de la competencia lingüística (gramatical) propiamente dicha. V. F. El estudio de las diferencias individuales siempre ha sido de gran interés para los investigadores. V. F. Desde el punto de vista práctico, entre otros aspectos, el conocimiento sobre las diferencias individuales es de un valor incalculable para discriminar, por ejemplo, entre rastreos en el desarrollo de las simples variaciones dentro de la normalidad. V. F. n general parecen existir dos estilos de aprendizaje del lenguaje y, aunque estos han recibido varios nombres, los más empleados son referencial y expresivo. V. F. El estilo referencial se caracteriza por un temprano vocabulario expresivo, una aproximación holística a la gramática, una aproximación prosódica a la fonología y se centra en la función interpersonal del lenguaje. V. F. Con el desarrollo, la diferencia entre los niños referenciales y expresivos se acentúan cada vez más. V. F. En la actualidad, podemos afirmar que la investigación ha determinado con claridad la causa de esas diferencias. V. F. |